La programación es muy amplia y hay muchas formas de programar. Es tan amplio que a muchas personas les resulta estresante aprender a programar. Sin embargo, cada programador tiene un estilo de programación diferente, y en términos generales, eso se llama paradigma.

El paradigma con el que se nos enseña a programar, en su mayor parte, es secuencial o estructurado. Es decir, las instrucciones van de arriba abajo, una tras otra. Simplemente damos un comando, luego otro, leemos unos datos, los manipulamos con alguna operación, ponemos un condicional para validar ese resultado y, según esos resultados, nos manda una cosa u otra. De arriba a abajo, así es como todos aprendimos a programar.

Pero, cuando empiezas a trabajar con proyectos más grandes, te das cuenta de que este paradigma no te ayuda mucho y ahí es donde las cosas se complican. Pongamos un ejemplo muy sencillo: imagina que un cliente te pide una tienda online para vender zapatos. ¿Cómo vas a hacer ese programa de arriba a abajo? es hora de pensar de otra manera porque tienes ciertas cosas:

• Los zapatos, que pueden tener precio, color, marca.
• Los productos deben poder filtrarse.
• Necesitas un carrito que se conecte a las pasarelas de pago para recibir el dinero.
• Tienes los usuarios que van a realizar las compras.

Hay muchas cosas que no se pueden escribir de arriba abajo. Y sin embargo, como es la única forma que conocemos de programar, lo hacemos de esa manera. Y como yo también he estado ahí, sé que es muy difícil cambiar la mentalidad.